Cantabria es conocida por sus destino marineros, bonitas localidades con playas como Laredo, Comillas o el propio Santander, pero en el interior también hay preciosos parajes, como Potes, escondidos entre motañas y a los pies de los picos de Europa. Os cuento lo que encontrarás si pasas un día en Potes, disfrutando de Cantabria.
¿DÓNDE ESTÁ POTES?
Potes es un pequeño municipio de Cantabria, capital de la comarca de Liébana, y está a unos 50 Km de San Vicente de la Barquera hacia el interior. Para llegar a Potes hay que atravesar el desfiladero de la Hermida con sus más de 20 kilómetros de estrecha carretera y curvas imposibles (N-621). Un paisaje asombroso y un "castigo" para el conductor, que bien se merece un orujo como premio al llegar a Potes. Si se sigue por esa misma carretera, 22 Km después, se llega hasta Fuente De, donde se encuentra el teleférico y el Parador de Fuente De, a los pies de los picos de Europa.
Desfiladero de La Hermida |
QUÉ VER UN DÍA EN POTES
Potes está situada en el centro de la comarca de Liébana, donde confluyen dos ríos: el río Deva y el río Quiviesa. Debido a esto, Potes está en un enclave natural precioso, rodeado de montañas y agua, y también de puentes (de ahí su nombre). Pero no solo el paisaje es espectacular, el pueblo y sus edificios hacen de Potes un pueblo con encanto. Para disfrutar de la Villa, lo mejor es callejear y perderse por sus calles, pero para no olvidarse de los edificios más importantes, aquí va una pequeña explicación de cuáles son y al final del post hay un mapa con los mismos.
La Torre del Infantado
La torre del Infantado es el edificio más emblemático de Potes. Es una torre del Siglo XV y en sus orígenes tenía una función estratégica y militar y acabó siendo la cárcel. Hoy en día es el ayuntamiento y también una sala de exposiciones, con exhibiciones permanentes y temporales. La Torre del infantado tiene seis plantas distribuidas entorno a un patio central que permite iluminar con luz natural las estancias interiores. Se puede subir a las almenas, desde donde hay una panorámica de la villa de Potes entre las montañas de los picos de Europa
Torre del Infantado |
La Iglesia de San Vicente Martir
En realidad hay dos iglesias. La iglesia vieja de San Vicente Martir, en cuyo pórtico se encuentra la oficina de información y turismo y la Iglesia de San Vicente Martir. Ambos se encuentran en la misma plaza, donde se encuentra la estatua del violinista Jesús de Monasterio, oriundo de Potes. Yo antes de visitar Potes no le conocía, pero fue un afamado violinista y al final de su carrera fue el Director del Real Conservatorio de Madrid. La primera iglesia se construyó en el Siglo XIV y a lo largo de los siglos sufrió muchas modificaciones hasta que en el siglo XIX se construyó la nueva. Merece entrar a ver sus retablos barrocos que vienen del antiguo convento Dominico de San Raimundo. En uno de los laterales de la iglesia está el monumento de la alquitara. Es el utensilio que se utiliza para destilar el orujo. El orujo es tan importante en esta región que además de tener un monumento, todos los años se celebra la fiesta del orujo durante el segundo fin de semana de Noviembre.
Iglesia San Vicente Martir |
El Puente de San Cayetano
El puente de San Cayetano y sus alrededores es uno de los rincones más bonitos de Potes. Este puente medieval se puede ver desde la carretera general que cruza el pueblo, que es la primera foto del post, pero merece la pena adentrarse por el casco antiguo y verlo de cerca. Hay un paseo a la orilla del río muy agradable. Esta senda fluvial tiene 2 kilómetros de longitud y empieza en el puente de San Cayetano. Nada más bajar a la senda nos encontramos con un viejo molino muy bien conservado y siguiendo el cauce del río se cruza bajo el puente de la cárcel, lugar donde confluyen los dos ríos, el Deva y el Quiviesa, bajo la atenta mirada de la Torre del Infantando.
Puente de San Cayetano |
La Plaza del Capitán Palacios
El puente de la cárcel une la Torre del Infantado con la Plaza del Capitán Palacios. En el centro de la plaza hay un quiosco y justo enfrente está la calle porticada llena de tiendas que venden souvenirs y productos típicos de la comarca. Entre los dulces, los embutidos, los quesos y demás es imposible no picar y comprar alguna de estas exquisiteces. Nosotros no podemos volver a casa de Cantabria sin comprar un paquete de sus enormes sobaos pasiegos.
Plaza Capitán Palacios |
Tienda de Potes |
El Casco antiguo de Potes
Imprescindible pasear por las estrechas calles de Potes con su aire medieval y sus casas bajas de piedra. En algunas zonas no te cruzarás con muchas personas, pero en otras, como la calle Cantabra, está siempre abarrotada de gente con sus tiendas, bares y restaurantes. Es interesante deambular por esa zona y descubrir todos sus rincones. Además los vecinos lo tienen todo muy bien cuidado y adornado con flores. Y si se hace la hora de comer, puede ser un buen momento de probar su deliciosa gastronomía. El plato más típico es el cocido lebaniego. Es un cocido de garbanzos en el que primero se sirve la sopa de fideos, luego los garbanzos con berza y por último sus sacramentos, como chorizo, morcilla, relleno y tocino. Una comida contundente y muy sabrosa, ideal para los días de invierno.
Rincón del casco antiguo de Potes |
QUÉ VER EN LOS ALREDEDORES DE POTES
👀 Monasterio de Santo Toribio de Liébana. Solo 2 kilómetros separan Potes del Monasterio de Santo Toribio de Liébana. Se trata de un bonito monasterio que tiene la particularidad de poseer el Lignum Crucis, siendo un lugar de peregrinación.
👀 El Teleférico de Fuente De. Este teleférico te sube al "balcón" de los picos de Europa. Las vistas desde allí arriba son impresionantes y hay rutas de senderismo para los amantes del Trekking y la naturaleza.
👀 Mogrovejo. Entre Fuente De y Potes hay una pequeña aldea llamada Mogrovejo que merece una parada y un paseo por sus calles. Entre otras cosas hay una torre, un museo de la escuela rural y como curiosidad, aquí se rodó la película de Heidi, que al parecer cambió los alpes por Mogrovejo.
Y después de conocer todo lo que Potes tiene para ofrecer, no me digas que no te han entrado ganas de pasar un día en Potes, disfrutando de Cantabria.
¡Me encanta Potes! Solo estuve una vez y tengo ganas infinitas de volver, esta vez para subir en el teleférico de Fuente Dé, que me quedó pendiente :) Me apunto lo del monasterio y Mogrovejo para cerrar el plan que tiene muy buena pinta!!! Muuuua!
ResponderEliminarEs un plan muy bueno para una escapada de finde, además lo tienes bastante cerquita, no?
EliminarCantabria es uno de nuestros pendientes del norte de España!
ResponderEliminarEste pueblito de Potes se ve muy bonito! Los alrededores deben ser espectaculares rodeados de montañas. Y el casco antiguo parece sacado de película. Me lo anoto para nuestro próximo viaje por esa zona! :)
Maravillosa Cantabria. Playas y montes y el interior como Potes, no tiene desperdicio. Y de la gastronomía ni te cuento... maravillosa!
EliminarCantabria me recuerda siempre a mi padre, y Potes era una de sus zonas preferidas. Siempre tengo pendiente una escapadita y no se porqué se cuelan otros destinos y lo voy dejando, pero ahora con tus fotos me entraron ganas de ir pronto. Me guardo la idea para el siguiente viajecito. Un abrazo.
ResponderEliminarNo lo dejes más! Es un lugar para disfrutar, show trip
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