Dentro de nuestro Recorrido por Argentina, una de las etapas imprescindibles es Iguazú. Y una de las cosas que se pueden hacer en las Cataratas de Iguazú es sobrevolarlas montado en un helicóptero. Yo nunca antes me había montado en un helicóptero y esta fue la primera vez, y la única, que lo he hecho, así que me he animado a contaros mi experiencia volando en helicóptero sobre las Cataratas de Iguazú.
Los que me vais conociendo sabéis de mis problemas con las alturas, pero cuando me enteré de que se podía volar sobre las Cataratas de Iguazú, no lo dudé ni un segundo. Me armé de valor y ¡a volar se ha dicho!. No me arrepiento de haber sufrido un poco porque la experiencia fue inolvidable, de esas de las que recuerdas cada minuto.
El helicóptero solo se puede coger en el lado de Brasil, desde Argentina no hay posibilidad, así que el día que hicimos la visita a las Cataratas de Iguazú del lado brasileño, fuimos a coger el helicóptero con la única empresa que lo ofrece.
El helipuerto está muy cerca del acceso al Parque Nacional de Iguazú, así que después de ver las cataratas de Iguazú a pie, y cuando íbamos de vuelta al hotel en el lado argentino, hicimos una parada para montar en el helicóptero. El horario es desde las 9:00 hasta las 17:30. Hay una salita de espera y haces cola hasta que te toque. En nuestro helicóptero se montaron 6 personas, 5 en la parte trasera y una con el piloto, así que solo hay un asiento al que no le te toca ventanilla. El número mínimo de personas para que salga el vuelo es de tres, así que si hay poca gente te tocará esperar hasta que haya el número mínimo. El vuelo dura 10 minutos y el precio es un poco caro (130$ precio en 2017) pero nada desorbitado. Los 10 minutos se me hicieron cortos, muy cortos, pero ¡fueron increíbles!
Nosotros no tuvimos que esperar mucho pero se me hizo eterno. Estaba muy nerviosa, con una mezcla de emoción y miedo, y no veía el momento de subirme al helicóptero. Y llegó nuestro turno. Con el ruido de las hélices nos subimos en la parte trasera y el helicóptero comenzó a tomar altura. Estos fueron los peores momentos, con esa sensación en el estómago, como cuando estás en una montaña rusa, pero una vez arriba, el miedo se esfumó. A nuestros pies la selva, verde y frondosa, cortada por el río Iguazú y a lo lejos empezamos a ver las cataratas. Poco a poco nos fuimos acercando y la vista cada vez es más increíble.
Como ya las habíamos visto a pie, íbamos identificando los lugares donde habíamos estado:
- Mira!! ese es el salto dos hermanas
- Y ese otro el de San Martín
- Mira las pasarelas por las que anduvimos ayer
- Ala!! La garganta del diablo!!!
Sin duda, lo más impresionante es la Garganta del Diablo, tanto desde la tierra como desde el aire. El helicóptero se va acercando por un lado para luego sobrevolarlo. Es algo que no se puede explicar. No me extraña que las cataratas de Iguazú sean una de las siete maravillas naturales del mundo. El río Iguazú se va acercando tranquilo al abismo hasta que, de repente, "pierde pie" y cae 80 metros en picado. Después de este subidón, el helicóptero vuelve volando sobre el apacible río Iguazú. Con la emoción que llevaba en el cuerpo, ni me di cuenta del aterrizaje. Solo quería volver a volar sobre las cataratas de Iguazú.
Me parece muy importante que el entorno de las Cataratas de Iguazú se mantenga rodeado de Naturaleza y que no haya sufrido demasiado con los abusos del turismo. Algo que sí que pasa en las cataratas del Niágara. Que las cataratas estén rodeadas de una selva tan grande y llena de animales le suma mucho encanto.
Creo que mi primer viaje en helicóptero no podría haber sido mejor, volando en helicóptero sobre las cataratas de Iguazú. Y vosotros ¿Os habéis montado en helicóptero alguna vez?
El parque nacional de Iguazú es Patrimonio de la Humanidad desde 1984 el lado argentino y desde 1986 el lado brasileño.
Realmente espectacular. Ya si visitar las cataratas desde ambos lador impresiona, el vuelo el helicoptero se deja extasiado! Ojalá algún día lo pueda disfrutar, aunque harbrá que ahorrar de lo lindo!
ResponderEliminarMerece la pena ahorrar porque es una experiencia inolvidable
Eliminar¡Tiene que ser increíble verlo desde ahí arriba! Aunque creo que me pasaría lo mismo que a ti, estaría súper nerviosa hasta estar dentro del helicóptero y por encima de las cataratas. Pero es una ocasión única que si puedo no me perderé.
ResponderEliminarSaludos.
Es increíble y con el miedo inicial la experiencia es más intensa!!
EliminarAy, Dios mío qué recuerdos tan increíbles de un lugar único en el mundo. Eso sí, no sé yo si me hubiera atrevido a montar en helicóptero. ¡Qué valientes!
ResponderEliminarUn saludo viajero.
Cristina
Pues fue increíble!! Nos gustó mucho mucho
EliminarWow! Que increíble experiencia debe ser ver esa maravilla natural desde el aire!
ResponderEliminarYo también habría tenido mucho miedo antes de subirme al helicóptero, pero también me habría animado a hacerlo. Experiencias como esas puede que sean solo 1 vez en la vida! Un abrazo Neti!
Eso es!! Hay que superar los miedos porque eso se olvida y solo queda lo bueno.
Eliminar¡ALUCINANTE! Me han encantado las fotos, la experiencia tuvo que ser una pasada y ahora seguro que el miedo está olvidado y sólo recuerdas lo espectacular que fue jeje Un besote!
ResponderEliminarGracias!! La verdad es que lo recuerdo como algo increíble
Eliminar¡Qué impresionante! Me han hablado muy bien de esa zona, y ahora todavía tengo más ganas de visitarla, si es que yo me apunto a un bombardeo
ResponderEliminarUn Beso
Pues apúntate que es un lugar que hay que visitar una vez en la vida!!
EliminarQue genial el vuelo, cuando yo estuve, hace muchos años, no tuvimos esa opción, pero hoy sin duda que sería imprescindible. Las fotos se ven preciosas, la perspectiva valió la pena los nervios y el susto.
ResponderEliminarUn abrazo
Siiii, pues ya tienes una excusa para volver ;)
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