QUÉ TIENE QUE TENER UN HOTEL PARA QUE NOS GUSTE

Una vez elegido el destino o el recorrido de un viaje, el siguiente paso es escoger el alojamiento. Hoy en día hay muchas formas de encontrar un hotel, pero no todos los hoteles cumplen siempre con lo que estamos buscando, así que suelo dedicar bastante tiempo a buscar el hotel perfecto, y me ha parecido buena idea contaros qué tiene que tener un hotel para que nos guste. No están en orden, porque depende un poco del tipo de viaje que hagamos, pero las tengo todas en cuenta, y mucho.

Hotel cataratas de Iguazú. Argentina.

1. UBICACIÓN

La ubicación del hotel es el punto más importante para mí a la hora de reservar uno u otro. Una vez escogido el destino, me paro a pensar cómo vamos a llegar hasta allí. Si viajamos en avión, la mayoría de las veces cogemos un tren o un autobús hasta el centro de la ciudad, y el hotel siempre lo busco cerca de alguna de estas paradas. No me gusta nada andar por una ciudad desconocida arrastrando maletas, es algo que siempre intento evitar al máximo.

Una vez mirado esto, también tengo en cuenta si vamos a hacer traslados de un día desde el hotel y en que medio de transporte van a ser. Si vamos a coger mucho el metro, o el tren/bus para ir a otras ciudades solemos reservar un hotel cerca de las estaciones de tren o cerca de una parada de metro. Por ejemplo, en nuestro viaje a Nápoles, cogimos el tren dos días bastante pronto por la mañana, así que nuestro hotel estaba cerca de la estación. Además, para ir al aeropuerto de Nápoles, hay un autobús con una parada también cerca de la estación del tren, así que, esa fue la zona que escogimos.

2. HABITACIÓN

Normalmente, en nuestros viajes, hacemos mucho turismo, por lo que en el hotel no pasamos mucho tiempo, así que tampoco buscamos grandes lujos en las habitaciones. Lo más importante para mí es la limpieza y que tanto la cama como la almohada sean muy cómodas. Si el destino es caluroso, no puede faltar el aire acondicionado, pero el tamaño de la habitación tampoco es algo que mire demasiado. Si dan desayuno, pues mejor que mejor, pero tampoco es imprescindible. En nuestro recorrido de 17 días por China, al ser un viaje organizado, no tuve la oportunidad de poder escoger hotel y en Shanghai estuvimos alojados en una ¡habitación increíble!. Si alguna vez me toca la lotería, yo quiero una bañera así en mi casa. Los días que estuvimos allí alojados, me di unos baños que nunca olvidaré.

Hotel en Shanghai. China

3. PRECIO

El precio del hotel es también un punto muy importante. Si no encaja en el presupuesto del viaje pues hay que buscar otro. Normalmente, los hoteles que están más lejos del centro o en pueblos periféricos tienen mejores precios, pero no te ciegues. Saca la calculadora y haz números de lo que te supone el transporte, porque hay países en los que es muy caro, y puede que no te salga a cuenta.

Dentro del precio, yo siempre escojo la reserva con posibilidad de anulación o contrato un pequeño seguro, por si acaso. Yo lo he tenido que usar en bastantes ocasiones. Las únicas veces que no lo hago es cuando el viaje es inminente.

4. SERVICIOS E INSTALACIONES

Si vamos en coche, el tema del parking es muy importante, o tiene el hotel o hay uno cerca. Si esto no es así, sigo buscando otro hotel porque sin parking, en una ciudad desconocida, cuesta mucho aparcar.

Si es un viaje urbano, nunca tenemos tiempo de usar la piscina, el Spa o cualquier otro servicio que puedan ofrecer. Pero en un viaje a un destino playero o de descanso, a mí me gusta que el hotel tenga piscina. El Spa, los masajes o el gimnasio no son importantes para mí, pero esto es cuestión de gustos.

Si tiene restaurante lo solemos utilizar, sobre todo para las cenas, que muchas veces llegamos agotados al hotel y cenar cerca de donde está tu cama no tiene precio.